Queridas viudas y huérfanos de la selva, la sabana, las estepas y demás enclaves naturales en donde soléis intentar sobrevivir a la maldad de los hombres prepotentes y estúpidos:
Por razones obvias de falta de transparencia carezco de datos para conformar el elenco de bajas que la más alta autoridad institucional de este país ha causado deliberadamente a vuestras familias. Sé de osos, de elefantes, de bisontes, de búfalos, de tigres... Pero no tengo la lista completa, aunque puedo imaginarla. Dada la edad avanzada del sujeto, que empezó a disparar muy joven, y que no se le conocen errores desde aquel en el que se llevó por delante a su hermano, es muy posible que mientras nosotros, aquí, nos debatimos en una crisis terrible, vosotros, ahí, todavía sigáis llorando la desaparición, por un tiroteo criminal y cobarde, de vuestros seres queridos. Sobre todo los elefantes, que tenéis tan buena memoria. Sabed que la mayoría de los españoles sufrimos por vuestras pérdidas.
Sabed también que no nos produce el menor alivio el hecho de que la última cacería de los vuestros le fuera pagada a nuestro monarca titular —no moral: esto no es la selva, ni él es el Rey León— por un millonario saudí de origen sirio, perteneciente a esa otra fauna de gentes adineradas que él frecuenta, en este caso sacrificándose estrictamente por ¡España! Sabed que estamos avergonzados, abochornados, indignados y hasta la cresta de tanta miseria ética y estética, y que os acompañamos en el sentimiento.
Os pedimos disculpas. Si la caza debió desaparecer con el Neolítico, la Monarquía debería desaparecer ahora. Haremos lo posible. Entretanto, es mejor que os pongáis a salvo en cuanto diviséis a un anciano rubio y coloradote que cojea. Es letal y va armado. ["Ni uno más". Artículo de la escritora española Maruja Torres, publicado en el diario El País el jueves 19 de abril 2012. La fotografía es de una cacería perpetrada por el susodicho en el año 2006; entonces no hubo críticas.]
Por razones obvias de falta de transparencia carezco de datos para conformar el elenco de bajas que la más alta autoridad institucional de este país ha causado deliberadamente a vuestras familias. Sé de osos, de elefantes, de bisontes, de búfalos, de tigres... Pero no tengo la lista completa, aunque puedo imaginarla. Dada la edad avanzada del sujeto, que empezó a disparar muy joven, y que no se le conocen errores desde aquel en el que se llevó por delante a su hermano, es muy posible que mientras nosotros, aquí, nos debatimos en una crisis terrible, vosotros, ahí, todavía sigáis llorando la desaparición, por un tiroteo criminal y cobarde, de vuestros seres queridos. Sobre todo los elefantes, que tenéis tan buena memoria. Sabed que la mayoría de los españoles sufrimos por vuestras pérdidas.
Sabed también que no nos produce el menor alivio el hecho de que la última cacería de los vuestros le fuera pagada a nuestro monarca titular —no moral: esto no es la selva, ni él es el Rey León— por un millonario saudí de origen sirio, perteneciente a esa otra fauna de gentes adineradas que él frecuenta, en este caso sacrificándose estrictamente por ¡España! Sabed que estamos avergonzados, abochornados, indignados y hasta la cresta de tanta miseria ética y estética, y que os acompañamos en el sentimiento.
Os pedimos disculpas. Si la caza debió desaparecer con el Neolítico, la Monarquía debería desaparecer ahora. Haremos lo posible. Entretanto, es mejor que os pongáis a salvo en cuanto diviséis a un anciano rubio y coloradote que cojea. Es letal y va armado. ["Ni uno más". Artículo de la escritora española Maruja Torres, publicado en el diario El País el jueves 19 de abril 2012. La fotografía es de una cacería perpetrada por el susodicho en el año 2006; entonces no hubo críticas.]
Mientras en muchas zonas de África miles de personas mueren cada día por falta de alimentos y medicinas, mientras en su propia "patria" miles de familias sufren desahucios por impago de hipotecas y subsisten en condiciones de precariedad, mientras el Gobierno de Mariano Rajoy (Partido Popular) -amparándose en la voluntad de los mercados financieros- aplica recortes presupuestarios en Educación, en Sanidad y en Ayuda al Desarrollo pero incrementa el presupuesto para el lucrativo negocio del Armamento, mientras el Congreso de los Diputados se gasta más de 90 mil euros en un retrato oficial de José Bono, ex-presidente "socialista" del hemiciclo, mientras su propio nieto de trece años se hallaba ingresado en el hospital por haberse disparado en el pie con una escopeta de caza en casa de su padre, Su Majestad don Juan Carlos I de Borbón, Rey de España, el mismo que hace años ya dio que hablar por haber matado al oso pardo Mitrofán (oso de feria emborrachado con vodka) y el mismo que se llenaba la boca en su discurso navideño con palabras como "EJEMPLARIDAD", en abril 2012 viajó en avión privado a Botswana a asesinar elefantes. Y se rompió su artrósica cadera y todo el mundo se ha enterado, para vergüenza ajena de sus súbditos e incluso de su mujer, que ama a los animales y detesta profundamente las sanguinarias aficiones de su marido. A propósito de ecologismo, el mencionado matapaquidermos es desde 1968 presidente honorífico del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) en España; organización que a raíz de lo sucedido está perdiendo socios como agua por un colador, lógica y naturalmente. El Museo de la Luna